El presidente Alfonsín asumió personalmente la gestión que puso fin a la crisis militar de cinco días. Ante la multitud concentrada en Plaza de mayo anuncio que se dirigirá a campo de mayo para intimar la rendición de los rebeldes. Allí mantuvo una entrevista con Aldo Rico (jefe de los sublevados y al finalizar informo que aquellos habían depuesto su actitud y que serian juzgados