El domingo 7 de octubre falleció el Ing. Rodolfo José Arenaza. Luego de resultar con graves heridas producidas por una caída en su domicilio.
Desaparece con el Ing. Arenaza la figura ejemplar de un hombre que supo ejercer su responsabilidad ciudadana
cuando la Nación lo reclamó: ejerció el cargo máximo de nuestra Intendencia desde el 3 de agosto de 1966 hasta el
4 de febrero de 1970.
Habia nacido en Témperley, en enero de 1920; recibió su título de Ingeniero civil en la Universidad de Buenos
Aires, en 1944; dedicándose a su profesión en esa ciudad y en nuestro Partido, donde proyectó y dirigió importantes
trabajos. Cúpole al extinto asumir sus funciones en la primera
hora del gobierno surgido de la Revolución de aquel año,
bajo la gobernación del Gral. Imaz y en el ejercicio del cargo manifestó una permanente preocupación por la cosa pública, dejando tras su renuncia una importante tarea cumplida: cientos de cuadras cuadras fueron pavimentadas en distintos barrios del Partido; modernizó la iluminación de las
principales arterias y proeeyó de luz a varios nuevos barrios que carecían de ella. Reestructuró y amplió el viejo edificio municipal y se preocupó por suplir faltas y fallas del sistema comunal.
El gobierno de la Provincia calificó entonces su gestión como «ejemplar digna y honesta», lamentando su voluntario alejamiento.
El Ingeniero Rodolfo Arenaza estaba casado con la sra. María Josefina Roldán Bonadeo y tenía cuatro hijos.
Sus restos fueron inhumados en el Cementerio San Antonio de Padua de la ciudad de San Miguel, en presencia de vecinos, ex colaboradores y amigos.