No ha de dejar de llamar la atención a quien lo repare, la frecuencia e intensidad de las lluvias, cuyas deplorables consecuencias en esta zona han sido las quince inundaciones que han sufrido en lo que va del año, los barrios Barrufaldi y Obligado, aledaños al río Reconquista.
Y no es para menos, desde hace alrededor de cincuenta años, las precipitaciones pluviales nunca alcanzaron esta frecuencia e intensidad. Según datos suministrados por el Director del Observatorio de Física Cósmica, situado como se sabe en San Miguel, S. J. Juan A. Bussolini, ha caído hasta la fecha desde enero de este año más
de 1900 milímetros, casi dos metros de agua.
Profanas casi en absoluto sobre esta materia, preguntamos también al P. Bussolini, haciéndonos eco de comentarios que
se hacen por ahí, si las experiencias alómicas tendrían alguna relación con las lluvias continuadas. Nos contesta en forma
rotunda que no, porque frente a la grandiosidad de la Naturaleza la acción del hombre, como en este caso, es sencillamente insignificante.
Las lluvias -continúa como todos los meteoros, tienen un proceso definido que se desarrolla en la atmósfera.
En la breve visita realizada a este gran instituto científico que honra a nuestro
país, pudimos constatar, asimismo, datos interesantes de las observaciones diarias
que alli se practican. En las lluvias, por ejemplo, los datos consignan para el mes
de abril último, 445,2 milímetros de agua – caida, y en el mes de septiembre solamente 4,9 mm.
Muy complacidos por la gentileza del P. Bussolini S. J. dedicado a los altos estudios de esta rama de la física, nos despedimos con un cordial apretón de manos, prometiéndole una nueva visita con fines de otras informaciones útiles para nuestros leclores.